Elitización y Política Económica

La elitización podemos entenderla concretamente como el proceso por el cual la Universidad se focaliza en brindar sus servicios a la élite económicamente privilegiada de la sociedad. La palabra élite alude a esa élite, no a la élite intelectual. Hecha esta puntualización, la elitización de la universidad se materializa en su gestión económica aumentando los precios de sus servicios (dejando de lado, a quienes no pueden pagar por ellos), adicionando costos innecesarios que hostigan a estudiantes de menores recursos y recargando el ordenamiento de las prioridades en la obtención de recursos.

1. Seguir con la lucha en contra del alza de las boletas.

En verano se realizó un plantón en contra del alza injusta de las boletas que aún no ha sido justificada: en vez de subir según el índice de inflación de educación y cultura, la subieron según el índice general de inflación. Ahora todos los alumnos tenemos que pagar 6% más que el año pasado, lo cual significa varios cientos de soles en muchos casos. En Acción Crítica planteamos que se establezca un parámetro justo para determinar el alza del valor del crédito. Así, tendremos la certeza de que los estudiantes no asumirán la carga económica producto de decisiones económicas equivocadas que tomen las autoridades.

2. Sistema de pensiones por escalas y no becas parciales.

El concepto detrás del cambio del sistema de pensiones a ‘becas parciales’ en vez de escalas es simple: somos una empresa que calcula el costo de su producto y luego ve cuánto cobra por este. Las becas son explícitamente subvenciones, controladas por la universidad, donde sí hay un efectivo control académico. No se trata de estudiantes regulares, están “becados”, es un “servicio” a la comunidad. Claro, las becas no tienen nada de malo, el problema está en que se quiere eliminar el corazón de la pluralidad universitaria (el sistema de escalas, que iguala en la categoría de estudiante a jóvenes de distintas clases sociales) por un “servicio”, que lo dan también las universidades más elitistas. La consecuencia: pensar a los estudiantes de escalas mayores como “más importantes” que los de escalas menores.

Es por esto que planteamos que el sistema de pensiones, vuelva a ser aquel de escalas. En el 94 existían 17 escalas distintas y hoy tenemos sólo 5 y proyectos de eliminar 1. Es importante que los alumnos y alumnas nos mantengamos vigilantes de los derechos que hemos ido perdiendo resultado de nuestra poca vigilancia sobre las autoridades de la universidad.

3. Préstamo universitario en la escala a la que uno corresponde

A partir de este año el préstamo universitario ha comenzado a cobrarse ya no en la escala a la que uno pertenece sino mínimo en escala 3, lo cual ha perjudicado a muchos estudiantes que tenían la oportunidad de seguir sus estudios en la Universidad gracias al préstamo universitario. Este incremento significativo ha hecho que algunos estudiantes se vean obligados a buscar otro tipo de préstamos o incluso abandonar sus estudios. Creemos que esta medida va en perjuicio de los alumnos de menores escalas y en consecuencia, de la pluralidad universitaria, por lo que exigimos que se vuelva a cobrar el préstamo universitario en la escala a la que uno pertenece.

4. Redistribución de las vacantes de admisión

Cada año la universidad otorga cierta cantidad de vacantes según facultad, y las facultades tienen la potestad de dividirlas como mejor les parezca. Nosotros creemos que es injusto que se den ventajas a alumnos de mayores recursos para ingresar a la universidad por medio de exámenes más fáciles, como el ITS, y que al final de cuentas, hacen que baje la competencia y la exigencia académica en los primeros años de estudios. Es por eso que una de nuestras propuestas sería la redistribución de las vacantes de admisión para favorecer a aquellas que son más inclusivas, tales como la evaluación del talento.

5. Seguir vigilantes con el tema del Campus Este

El año pasado se organizó una consulta a las bases para conocer la opinión acerca de la división de nuestra universidad debido a la compra de terrenos en Surco. La mayoría de los estudiantes votó en contra de esta división, y planeamos seguir vigilantes para que esta voluntad se respete: tener un campus en Surco y en otro en San Miguel significa dividir a la universidad, tener un campus ‘pituco’ y otro no, sería debilitar la representación estudiantil y además, se perdería la pluralidad que ha caracterizado a la universidad.

6. Mayores ventajas para aprender inglés

Sabemos que este año la universidad está gestionando la convalidación internacional de algunas carreras, por lo cual es importante que al egresar hablemos inglés. Sin embargo, dentro de la universidad no se nos brindan suficientes oportunidades para hacerlo, de manera que egresemos en las mismas condiciones. Es por esto que exigimos que a los alumnos se nos den mejores descuentos en Idiomas Católica, que correspondan con su realidad económica: la fusión de INIPUC y ELEPUC dejó a los alumnos de menores recursos sin la posibilidad de aprender inglés a un menor costo.